Stanislav Grof es uno de los pilares de la psicología transpersonal, debido a que su trabajo a lo largo de varias décadas ha revolucionado la comprensión de la conciencia, la psicoterapia y la espiritualidad.
Los niveles perinatales son una de las contribuciones más radicales de este pensador, quien propuso que el nacimiento biológico no puede ser entendido solamente como un hecho físico, ya que deja una huella psíquica profunda en nuestro ser y en la vida posterior del individuo. A través de sus investigaciones, y después de muchos años de atender a miles de pacientes usando la respiración holotrópica (herramienta que desarrollo junto con su esposa Christina), fue posible identificar 4 matrices perinatales básicas (BPM I-IV, Basic Perinatal Matrices) que correlacionan etapas del nacimiento con patrones psicológicos y experiencias simbólicas muy diversas.
Llevando a sus pacientes en terapia individual o grupal a experimentar estados holotrópicos, que significan “estados orientados o en dirección hacia la totalidad” (2002), en los cuales se aprecian profundos cambios en la percepción, descubrió que muchos de nuestros conflictos existenciales como sentirse atrapado, luchar sin éxito, anhelar la liberación, son re-ediciones de este patrón perinatal que todos experimentamos.
El trabajo desarrollado por Grof lo llevo a la creación de un nuevo mapa de la psique humana que incluye tres ámbitos:
- Ámbito biográfico: El nivel de nuestra historia personal
- Ámbito perinatal: Las matrices del nacimiento (BPM)
- Ámbito transpersonal: Las experiencias que trascienden la identidad personal y el espacio-tiempo.
En consecuencia, al ampliarse el mapa de la psique también es posible pensar que la Consciencia no está confinada o circunscrita solamente al cerebro, más bien es un fenómeno de dimensiones multidimensionales del que todavía nos falta mucho por explorar.
Referencias
Grof, S. (2002). La psicología del futuro. La liebre de marzo: Barcelona.
